En este libro hemos seleccionado algunos de sus poemas más significativos para adéntranos en el conocimiento del autor. También hemos incorporado testimonios de quienes le conocieron. Unos y otros nos ayudarán a recordar en algunos casos o conocer en otros a Miguel Martínez del Cerro.
La segunda parte es un testimonio, en prosa, de unos hechos históricos vividos por el autor en San Sebastián de Garabandal, Cantabria, en julio de 1962. Con su incorporación hemos pretendido dar a conocer, además de su estilo literario, los hechos vividos durante once días. Estos hechos fueron puestos en conocimiento del entonces obispo de Cádiz, Don Antonio Añoveros y el autor siguió, de forma escrupulosa, los consejos recibidos de su Obispo. No se pretende calificar unos hechos. Solo narrar lo vivido en aquella aldea.
En este mismo sentido queremos expresar nuestra absoluta obediencia a la autoridad eclesiástica y más concretamente en este caso al señor Obispo de Santander en todo lo que a su ministerio concierne.
Por último se incluye un sencillo pero sentido poema de amor a nuestra Madre, la Santísima Virgen María, escrito en agosto de 1962, a la que se dedica este pequeño libro.
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